Antes de crear un canal de Social Media debemos:

1.-Definir cuál es nuestro objetivo por el cual queremos abrir un canal de social media.
Ejemplos:
- Transmitir la filosofía de nuestra marca y nuestros valores.
- Intercambiar con el público objetivo.
- Generar contactos con futuros clientes.
2.- Es muy importante hacer un estudio de mercado, investigar nuestra competencia: qué canales utiliza, la tonalidad y frecuencia de sus posts, los tipos de mensajes, etc.
3.- Se debe analizar emprendimientos de éxito, influencers y otros canales bien posicionados, incluso externos a nuestro sector. Esto permite ver cómo se comporta en las redes sociales y adaptarlo a nuestro rubro y a nuestros contenidos.
4.- Escoger el canal social conveniente, según lo realizado anteriormente y teniendo en cuenta los más apropiados para nuestra marca y nuestros productos y/o servicios.
Por ejemplo:
- Si somos una empresa B2B lo más apropiado es tener presencia en LinkedIn.
- Si somos una empresa B2C lo más adecuado es tener presencia en Facebook e Instagram, estos son indispensables tenerlos, no solo por su envergadura, sino por todo el contenido audiovisual, en diferentes formatos que podemos compartir en ellos.
- Si somos una empresa que requiere la inmediatez de los mensajes, nos haría falta tener presencia en Twitter.
5.- Analizar los recursos disponibles antes de abrir los canales de social media. Es más eficaz, eficiente y efectivo estar en los pertinentes según el rubro de tu emprendimiento, tu disponibilidad de tiempo para atenderlos y capacidad de recursos humanos y financieros para su buen funcionamiento.
6.- ¿Qué debe tener tu Estrategia de Marketing en las Redes Sociales?
a) Frecuencia de publicación:
- Facebook: 3 veces por semana.
- Instagram: 1 vez por día.
- En las historias de ambas redes sociales, todos los días.
- Twitter: tantas veces al día como sea posible, al menos 1 vez.
- LinkedIn: 2 contenidos de calidad a la semana.
- YouTube: al menos 1 video semanal.
b) La tonalidad de las publicaciones:
- Deben estar en correspondencia con el tipo de público que se haya definido como objetivo.
- Si es pertinente utilizar otros recursos audiovisuales como imágenes, emoticones, GIFs, música, efectos de audio y visuales.
c) Tipo de contenido a transmitir:
- No debe ser siempre el mismo, por ejemplo, se puede determinar tipos de contenidos para cada día de la semana: sobre nuestros productos o servicios, la labor a lo interno de la organización, casos de éxito que se haya logrado con la venta a clientes, etc.
d) Desarrollar una base de datos con todas las preguntas y sus posibles respuestas que cualquier público realice sobre tu marca.
- Debe abarcar desde las preguntas con respuestas positivas hasta comentarios en momentos de crisis o de sensibilidad.
- Se puede clasificar por su tipología.
- No se debe optar por el silencio, lo mejor es proporcionar una disculpa y si es posible reparar el daño con una oferta.
Coméntanos si te ha ayudado este post, o si tienes otra estrategia para tus redes sociales que te haya sido efectiva.
Puedes descargar aquí esta pequeña guía: